Así puede un pueblo resurgir de sus cenizas y no desaparecer

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Para los que hemos amado los pueblos nos da mucha pena ver cómo se encuentran ahora. La verdad es que es una pena visitar aquellos pueblos que en los años 80 y 90 nos hacían tan felices. A mí me gusta mucho ir a mi pueblo, que es Matapozuelos, en Valladolid, pero es cierto que cuando recorro las calles desiertas se me cae el alma a los pies. Y es que tengo que ser consciente de que esos tiempos no volverán.

Yo ahora soy padre, y siempre intento llevar a mi hija de tres años al pueblo los días que puedo. Voy por la era que siempre me recuerda a cuando yo jugaba con mis amigos y veo que ya no queda nada. Ni las porterías viejas con las que jugábamos, que luego pasaba a ser con dos mochilas. Tampoco están los niños que jugábamos en la plaza mayor al escondite o a tres marinos en el mar. Ya no quedan niños y eso se nota. Por suerte mi pueblo todavía tiene 1.000 habitantes, que es una cifra mágica para los pueblos, pero es cierto que hay otros pueblos que se están quedando vacíos. Por ejemplo el de mi mujer, Castroverde de Campos, que tiene poco más de 200 habitantes y es una pena.

Es cierto que ahora mismo el mundo rural tiene muy mala pinta. Y aunque cada vez somos más en las ciudades y sobre todo en los municipios del alfoz, los pueblos se están quedando vacíos. Pues bien, muchos dicen que las nuevas tecnologías son uno de los causantes de esta situación. Sin embargo, yo lo que creo es que se tiene que aprovechar para que los pueblos resurjan de sus cenizas.

Y es que soy de los que pienso que las nuevas tecnologías pueden revolucionar un pueblo pequeño. En primer lugar, el acceso a internet de alta velocidad puede hacer que los habitantes del pueblo puedan trabajar de forma remota. El famoso teletrabajo que se puso tan de moda durante la pandemia pero que luego se ha esfumado como  la gaseosa. Una buena conexión a Internet nos va a permitir atraer a profesionales que busquen escapar de la vida urbana porque ya están hartos. Esto a su vez podría incentivar la creación de espacios de coworking y la llegada de empresas tecnológicas que generen empleo localmente. Porque esto está claro, es la pescadilla que se muerde la cola. Si no hay Internet no hay gente ni empresas que se quieren ir a los pueblos.

La conexión a Internet es básica, por eso es importante conocer empresas de tecnología que apuestan por esto. Afortunadamente en mi pueblo se tiene cobertura de todas las compañías, aunque yo siempre recomiendo que lo hagan con Oroc, además de que tiene unos precios muy buenos, sobre todo me baso en que no tienes que irte a la salida del pueblo o subir al sobrado para pilar una rayita en el teléfono móvil.

Mejorar la vida

Además, las nuevas tecnologías son la gran herramienta. Estas pueden mejorar la calidad de vida de todos los habitantes del pueblo y es algo que nadie me puede negar.  Esto se hace porque se pueden obtener servicios como la atención médica a distancia, la educación online, el comercio electrónico, entre otros muchos asuntos que de verdad que nos puede servir para volver a recuperar lo que fuimos. Estoy convencido de que esto puede atraer a familias que buscan una forma de vida que es mucho más tranquila, pero sin sacrificar las comodidades que siempre tenemos en las grandes ciudades.

Mundo verde

Por otra parte, la llegada de las tecnologías verdes como son la energía solar y la gestión inteligente de residuos también creo que pueden hacer que el pueblo sea más sostenible y atractivo para quienes buscan vivir de forma eco-amigable. Y es algo que para los pueblos les puede venir muy bien, aunque también hay que ver que no nos pasemos de la líneas.

En resumen y para que quede más claro, las nuevas tecnologías pueden convertirse en una gran oportunidad para revitalizar un pueblo pequeño, atraer a nuevos habitantes, generar empleo y mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Os lo digo de verdad. Es importante que las autoridades locales y la comunidad en general se comprometan a aprovechar estas herramientas porque estamos claro, que con servicios básicos la gente se va a volver al pueblo. Mi idea es que ojalá mi hija pueda vivir lo que yo viví en mi pueblo.

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