Si tu cabello se ensucia con facilidad y se siente continuamente apelmazado, es señal de que tienes el pelo graso, ya que tu cuero cabelludo produce sebo en exceso.
«La grasa capilar es esencialmente una mezcla de desechos y de los aceites naturales producidos por el cuero cabelludo que se acumulan con el tiempo», explican los expertos de la firma Pantene.
La grasa producida por el cuero cabelludo es muy beneficiosa para la fibra capilar, pero el exceso de sebo hace que la melena luzca sucia.
Desde el Instituto Médico Dermatológico, informan causas de este problema. «Desde aspectos hormonales como una cantidad elevada de testosterona hasta otros como el estrés, el tabaco o el alcohol», exponen.
Aunque también puedes tener el pelo graso por una alimentación poco equilibrada o un tratamiento farmacológico. Cualquier mujer puede tener el pelo graso, pero se da con mayor frecuencia en melenas lisas y largas.
Pero hay maneras de cuidarlo para devolverle su aspecto limpio. Es importante encontrar algún champú para pelo graso que se adapte a tus necesidades. Lo recomendable es lavar el pelo 2 o 3 veces por semana y con agua tibia.
«Lavarse el pelo con agua caliente es un error en el que muchas personas, aun siendo conscientes de sus efectos adversos, siguen cayendo. Esto no solo afectar negativamente a la salud del cabello debilitándolo; sino que, en el caso concreto del pelo graso, elimina los aceites esenciales que protegen el cuero cabelludo. La consecuencia es que el cuero deba generar más aceites para compensar la escasez provocada por la acción del agua caliente. Lo mejor es recurrir al agua tibia y, aún mejor, terminar con un aclarado frío», informan desde El Mundo.
Algunos tratamientos de coloración, acondicionadores y champús agresivos pueden provocar que el pelo se engrase.
Evita los champús con óleos porque este tipo de productos suman sebo. Opta por los productos naturales y con fórmulas ligeras. Debes lavarte el pelo con un champú ecológico con contenido 100% biodegradable y reutilizable.
Los profesionales de amenities, expertos en productos ecológicos, explican que estos productos son 100% respetuosos con el medio ambiente.
Para cuidar el cabello graso debes tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
-Seca el cabello con suavidad con la ayuda de una toalla y sin frotar excesivamente.
-El secador y la plancha podrían empeorar el aspecto del pelo graso. Así, que no abuses de estas herramientas.
-Pero si quieres utilizar el secador o la plancha, te aconsejamos los protectores térmicos porque estos productos protegerán tu melena del aire caliente.
-A la hora de utilizar un acondicionador, una mascarilla o un sérum, no los apliques desde la raíz.
-Cuando te laves el pelo graso debes comprobar que has eliminado todo el producto.
-Intenta no tocarte el pelo porque solo conseguirás que se engrase más fácilmente.
-Cuando estés en casa, puedes recogerte el cabello en una coleta o moño, así evitarás manosearlo tanto.
-No cepilles el cabello desde la raíz, hazlo de medias a puntas, para evitar repartir la grasa por todo el pelo.
¿Cómo hidratar el pelo graso?
También puedes usar aceites capilares, pero es importante conocer el producto y aplicarlo de manera correcta. Opta por los aceites específicos como el de limón, salvia, lavanda y árbol de té.
Estos aceites son idóneos para los cabellos grasos por sus propiedades antisépticas y equilibrantes del pH. También tienen propiedades seborreguladoras que ayudan a equilibrar la producción de aceite natural del cuero cabelludo.
Solo debes aplicar unas pocas gotas en el cabello. Además, la aplicación debe centrarse en las puntas y las partes medias del cabello.
La aplicación de estos aceites facilita el peinado y aporta suavidad. Se recomienda acudir a un especialista capilar para un estudio detallado del cuero cabelludo.
El aceite capilar puede ofrecer los siguientes beneficios: reduce el encrespamiento, regula la producción de sebo, no incrementa la grasa, aumenta el brillo, no apelmaza el cabello, protege el cabello de daños ambientales como la contaminación y los rayos UV. ¡Ya sabes que los aceites no están vetados para aquellos con cabello graso!
Es importante consumir alimentos con vitaminas del grupo B, para combatir la grasa y fortalecer el cabello. A continuación, te explicamos cuáles son esos alimentos:
–Legumbres: los garbanzos, lentejas, judías blancas y pintas contienen vitaminas del complejo B que ayudan a hidratar el folículo piloso.
–Pescado azul y blanco: las sardinas, el salmón y la merluza también contribuyen al crecimiento capilar.
–Yema del huevo: la yema del huevo fortalece la keratina del cabello. Además, los huevos son ricos en vitamina B12.
–Lácteos: el queso, los yogures y la leche poseen un alto contenido en calcio, vitamina B12 y E.
